Ella lo necesitaba. Necesitaba esos abrazos que le hacían sentir que todo estaba bien, aunque el mundo se desmoronara a sus espaldas. Necesitaba esas miradas que le aceleraban el corazón, que le hacían perder la razón. Necesitaba esos besos que la llevaban al cielo, que la hacían volar sin despegar sus pies del suelo. Ella necesitaba esas manos, que cuando la agarraban fuerte, sentía que nada malo iba a ocurrir, que estaba segura, que nadie la podía atacar. Ella lo necesitaba a él, necesitaba esa piel blanca, ese pelo negro, esos ojos marrones. Y él también la necesitaba, la necesitaba como al aire para respirar, solo que nunca se dio cuenta de lo mucho que la necesitaba hasta que el destino se quiso meter en el medio, hasta que la culpa, el miedo, los quiso separar, y en ese momento él supo lo mucho que necesitaba esos labios rojizos con sabor a miel, esa piel blanca y esas pecas que eran perfectas, él necesitaba mirarse en esos ojos negros y profundos, él necesitaba de ella, como nunca había necesitado de otra persona.
No me va que me dejes con la intriga de que si se quedaron juntos o no Gabriela jaja. Me encanto, enserio, creo que todos llegamos a necesitar con tal magnitud a una persona
ResponderEliminarHola estoy dandome a conocer: http://dress-toexpress.blogspot.com Espero cruzarte por alli, un beso grande
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